Ahí van algunas:
El ruiseñor
unos días no viene,
otros dos veces.
No tiene nada
mi choza en primavera.
Lo tiene todo.
Las hojas nunca caen
en vano. Por doquier
suenan las campanas.
Ráfaga otoñal:
Ya no tengo nada que hacer
en este mundo.
Escribo, borro, reescribo,
borro otra vez, y entonces
florece una amapola.
Para realizar una
ilustración sobre poesía yo he elegido el siguiente hayku:
Ilustracion de Pablo García - Acuarela y montaje infográfico con Suite Corel. |
Al leerlo por primera vez me surgieron las imágenes diagonales, la invasión de flores y la estrella Polar para indicar la puerta norte.
Inmenso, Pablo. Un beso.
ResponderEliminarNo termino de entender el hayku, es evidente que a una mente occidental como la mía, aunque esté abierta a otras culturas como la oriental, le resulta difícil asimilarlo. Y reconozco que es una pena, me seguiré esforzando.
ResponderEliminarLo que sí te digo es que tu ilustración y el hayku juntos, ayudan.
¡Perfecto! Un abrazo, Pablo.
Estoy con Román, algunos si que los entiendo, otros no tanto.¡Me queda tanto que aprender!toda la vida es poca. Lo que si me encanta es tu preciosa ilustración, besos
ResponderEliminarGenial! felicitaciones!
ResponderEliminarUn placer haber pasado por aquí, saludos!
Gracias por pasarte por este rincón.
EliminarUn abrazo.